Mi yo interior ha dejado de bailar porque mi corazón ha dejado de marcar el compás. Ese adiós ha matado de un golpe demasiadas esperanzas y un único futuro. Has tirado por la ventana mi corazón y me he caído de un golpe al suelo. Llevo tiempo andando sobre nubes y ahora tu mera respiración me ha empujado y me ha provocado una terrible caída de realidad. Hoy no te tengo esperando en el portal ni me vas a recoger de mi clase de alemán. Hoy la caña de después me la tomo sola pero estoy por ahogarme en ella hasta saborear cada recuerdo de ti. Ayer me escribías buenas noches y hoy sólo son noches sin cielo estrellado ni si quiera está la luna. ¿A quién va a aullar el lobo? ¿Por quién van a brindar ahora los amantes de aquel bar? ¿A quién van a hacer testigo de las locuras de un sábado noche? Hoy siento que grito sin voz. Me ahogo en alcohol. Me empujan los recuerdos. Corro hacia atrás y me choco con un pasado muy olvidado pero muy presente todav